Versión oficial en el barrio: El camarero del bar habitual y ella misma han hecho correr el rumor de que la embestida fue mi fuerte. Ella ya sabía que el salto del tigre desde el armario empotrado no saldría bien, él insistió y ella acabó con collarín, que es causa de tanta pasión.
Versión oficial de cara al negocio: el lubricante sabor melón que lleva ginseng y guaraná, sí, sí el del bote rosa que es tan tan tan bonito, está tan tan tan bueno que no podía dejar de chupar. Ahora seguirá con el de frutas de la pasión efecto calor ¡Cómpratelo!
Versión oficial real (siempre comentada con cara de ¡No te lo vas a creer, siento ser tan poco original): Ha sido durmiendo. Después de varias conversaciones con desconocidos usuarios del collarín se conoce que es normal que estas cosas pasen durmiendo bocabajo. Ya sabemos que Cris duerme boca abajo ahora.
Lo que os puedo decir a su favor es que la piel del cuello le ha queda ultra fina con el tratamiento sauna que incorpora cualquier collarín en el mes de Agosto. Alguna venaja tendrá que tener llevar bufanda en verano. ¡Pura miel! Al ataque, chicos, pero con cuidado que aun hay dolor y mareos.
Recupérate, Crisi, besotes en tu fino cuello.
Saludos a mis nuevos lectores, ¿los hay?
Sandra.
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario